El ánime japonés me gusta y para empezar deberíamos partir de este punto. Encima, éste director concretamente tiene chispa y, aunque a veces se centra demasiado en lo psicológico de sus personajes haciendo de sus películas paranoyas andantes, el talento le sale a raudales.
La historia que se nos plantea gira en torno a una psiquiatra llamada Atsuko, que es conocida también como Paprika cuando ejerce de detective, que se infiltra en las mentes de sus pacientes para robar cierta tecnología llamada DC Mini.
Una sugerente película llena de giros constantes, detectivesca, con grandes escenas dramáticas incluso a veces rayando en lo pesado, pero en definitiva calidad de la buena en el que es el segundo mejor director del momento.