Douglas parece que ha entrado en una edad en la que los únicos papeles creíbles son estos que muchos como él han gastado ya. Ese tipo que es estafado por sus compañeros mismos, blablabla. Encima, para más ánimo de sospecha, aparece una actriz mediática (Longoria) por excelencia en mitad de un film realizado por un director como Clark Johnson, con S.W.A.T en el currículum.
El problema es que demasiada acción en estos dos actores me chirría, que probablemente no me guste ese toque de ritmo infernal en las interpretaciones de ambos porque, encima, nunca me ha convencido el caer de labio de ese actor a medias, en resumidas cuentas no me la voy a creer. Con algo de artificio de planos y violencia acabaré pensando que estoy en una fiestas de barrio pero que no es el mío.