Crítica de la película La Saga Crepúsculo. Amanecer (Parte 1) por Obi-Wan

A estas alturas, de nadie es desconocido que esta es una saga destinada sobre todo para adolescentes hormonados e inevitables enamorados de las obras literarias. Todos sabemos lo que sus películas pueden ofrecer: romanticismo excesivamente empalagoso, profundos sentimientos amorosos no correspondidos y el torso de Jacob. En mi pre, sólo pedía cierto ritmo. ¡Solo! En el minuto cincuenta, con casi una hora todavía por delante, cuando un atisbo de que la intriga de la cinta va a aparecer, ya tienes ganas de asesinar a Melissa Rossenberg a Bill Condon y a todo el grupo de trabajo que han destrozado, literalmente, la cuarta entrega (aunque aun le quede la segunda parte) de esta serie de películas. Si Luna nueva fue ya lenta, aburrida y previsible, esta Amanecer, es como una temporada entera de un culebrón que se nutre de tres hechos importantes durante todo un año. En definitiva, una auténtica tomadura de pelo.
 
Volviendo al ritmo que se imprime, que se peguen cincuenta minutos para casarse y pasar la luna de miel no tiene nombre. Ni los pocos gags graciosos sobre las típicas bromas que se podrían hacer sobre el amor eterno viniendo de boca de un vampiro logran amenizar el metraje. Besos extenuantemente largos, poco sexo y mucha miradita que hacen aborrecer a Robert Pattinson y Kristen Stewart. Pero, oh sorpresa, Bella se queda embarazada. Mi mente viajó muy lejos creyendo que un malevolo engendro saldía de sus entrañas, pero no fue así. Claro que algo me tenía que imaginar, porque desde ahí hasta el final la trama empieza a hacerse casi incomprensible, con vocablos no habituales para mentes no crepusculadas. Una ligera y sonrojante batalla de vampiros contra licantropos con disidentes incluidos y una resurrección que ni la de Jesus acaban por ridiculizar la película, que sin dudar puedo afirmar que es lo peor que he visto en años.

  Que alguien acabe con este menosprecio a los vampiros, aunque sea de la mano de la Beckinsale que sorprendentemente retorna con su Underworld 4, que por lo menos dará presencia en pantalla, buenas peleas y mucho más estilo. Esta saga pastelosa hay que enterrarla ya, por latosa.