Crítica de la película Furia de titanes por William Munny

Sabía que la industria no iba a respetar, sabía que no iba más que a intentar alegrar a los nuevos, pero no pensaba que tanto. Si los diálogos eran necesarios y esperados, han sido también eliminados de la fórmula, y el problema no es la acción, no me desagrada, no me rechina, pero por qué no respetar la otra parte, la parte del verso lejano...

Cayendo en el infantilismo de los inmortales Zeus y Ralph me pongo serio Fiennes, sus escenas provocan que sea más creíble el enorme escorpión que un par de actores de su taya, el recorte de frases, el silencio de los momentos de descando tan necesarios en el espíritu de la historia con tratados con crueldad y lo que es peor falta de respeto. Arterton es ridícula y sus momentos pésimos, un destrozo de pasiones y creencias, que tan solo deja un bueno luchando contra bichos enormes. Sam mantiene el tipo, es fotogénico y eso le valió a Tom Hanks también en los malos momentos.

Los remakes deberían servir para engrandecer o adaptar a la modernidad el momento exacto del éxito de un producto fílmico de envergadura. En este caso ni siquiera el ritmo y la caligrafía de efectos digitales consiguen hacer olvidar la simpleza preciosa de su antecesora. Y esto es una pena, esto es un horror que a los más pequeños deberíamos intentar evitar.

PD: Voy corriendo a desempolvar la primera edición para tenerla a mano antes de que esta mala película caiga en malas manos.