Está hecha con ganas, con alma, con las ideas muy claras. A la vista está que Glenn Standring, director y guionista es un verdadero fan de la ciencia ficción. Se nota especialmente en sus objetivos y en los elementos que utiliza.
Ante todo, la película quiere crear un universo diferente. Para empezar, la anunciada ucronía, que a mi modo de ver, resulta un tanto difusa. Creo que no es suficiente con mezclar componentes de todo tipo de épocas de manera desordenada o, si se quiere, aleatoria. Debe haber un cierto sentido en todo, que la mente acepte casi como natural una mezcla imposible de tiempos. Creo que eso no está bien conseguido, aunque resulta interesante el intento.
Los conceptos característicos de ese universo, como el tráfico de vacunas o el secretismo del gobierno son otros de los elementos típicos de la ciencia ficción más de género, pero siento que no están trabajados y enlazados de manera coherente con la historia. Y por supuesto, la hermandad, quizá lo más logrado, que también es lo más importante.
En parte por la notable falta de presupuesto, y creo que en parte porque Standring no tiene el talento suficiente para un proyecto como este, la película queda a veces deshilachada, sin entrar de lleno en lo que debe o sin representar de forma certera el universo que parece estar tan claro en su mente. Uno se queda con la sensación de que el libro era mejor… pero es que no hay libro. Si esta película la hiciera Cuarón o Proyas por ejemplo, otro gallo cantaría.
Capto muchas reminiscencias a Blade Runner, clásico venerado por los amantes del género. Si cambiamos vampiros por replicantes, la historia se da un aire. Y los grandes planos generales, salvando las distancias, tienen bastante parecido. Todo esto, apoya mi visión de este proyecto: un enamorado y conocedor de la ciencia ficción, que ha querido plasmar en esta película el tipo de cine que le apasiona pero que no ha sabido como afinar los detalles.
Ha hecho el tipo de película que me encanta, desde luego, pero dentro de ese tipo, esta no es de las mejores. Le falta mucho, le falta manejar el ritmo, cuidar más los personajes, no caer en finales mecánicos. Aun así, un trabajo positivo, imaginativo y muy voluntarioso. Espero volver a ver otra película de este director. Todo es practicar.