Crítica de la película Tokyo! por Iñaki Ortiz

Muestra de talentos


4/5
07/04/2009

Crítica de Tokyo!
por Iñaki Ortiz



Carátula de la película Los tres segmentos comienzan con mucha fuerza, demostrando el punto fuerte de sus creadores, aunque quizá todos ellos terminen diluyéndo su energía a medida que avanzan, como si no supieran adaptarse al metraje a medio camino entre la anécdota y el completo desarrollo.

Michel Gondry

Michel Gondry juega todas sus cartas. Su fabuloso montaje confuso; sus imágenes abarrotadas de elementos, su barroquismo moderno; los efectos especiales que cámara en mano cobran una autenticidad casi artística; y sobre todo sus astracanadas caseras, como la máquina de humo y la manera en que se la salva de la destrucción. Como siempre, la imaginación del director se funde con la de sus personajes. Quizá este segmento sea el más redondo, con un buen equilibrio entre su ritmo y su punto de locura.

Leos Carax

Leos Carax nos regala un delicioso despropósito. El segmento más disparatado y divertido, con una dirección a la altura, que no duda en hacer uso de todo tipo de formatos, como el video o las grabaciones de móviles, para dar forma a esta especie de performance callejera. El traveling inicial por las calles de Tokyo es para quitarse el sombrero, no tanto por su dificultad como por su frescura. Las diferentes texturas de imagen encajan a la perfección, confeccionando un collage de la percepcion visual de nuestros días. Lástima que después en la segunda mitad, el nivel no se mantenga, aunque siga siendo una desfachatez muy divertida.

Bong Joon-Ho

Este director sigue prometiendo una carrera interesante. Nos demuestra aquí toda su capacidad visual, mucho más limpia que la de sus compañeros, con un constante juego con la fotografía, hasta tal punto que el preciosismo visual termina siendo el protagonista, eclipsando la historia del hikikomori. Una vez más lo que empieza con mucha energía va diluyéndose. En parte porque este perfeccionismo visual encaja perfectamente con la presentación del chico, pero no termina de funcionar con el desarrollo que se vuelve algo perezoso. En cualquier caso, un derroche de las capacidades visuales del coreano. Y una buena crítica a la resignación de la rutina diaria.

En definitiva, una película que vale mucho la pena, por sus historias sorprendentes, tan propias de Japón, que son un reflejo interesante de la personalidad de cada director.



Google+

comments powered by Disqus
Tokyo! en festivales: Festival de Sitges 2008




Más críticas de Tokyo!

Ver la precrítica
Desarrollado por Dinamo Webs
Creative Commons
Publicado bajo licencia
de Creative Commons