Aunque el esfuerzo por crear un tono distinto y personal al mundo de nuestra protagonista, parlanchina hasta la extenuación, está bastante logrado, lo importante de la película, la química entre ambos, creo no es suficiente. Él se mece en una serie de miradas poseídas para tratar de crear esplendor, pero no lo consigue, ella más real, simplemente se muestra como una estatua tierna y misericordiosa.
El comienzo y el final me han resultado bastante horrorosos. El comienzo por esa rapidez por explicar, una anciana que demuestra valentía ante la cámara pero con unos gestos impropios, y el final, rápido, escena de sexo lúgubre, y la salvación en forma de terremoto casual. El resto de la película no necesita estas dos partes, carentes de explicaciones nuevas, las normas podrían haberse hecho notar sin más.
La parte central es hasta interesante, los secundarios justitos pero sin molestar, su historia decente, y el tono melancólico de la protagonista hasta delicado, pero le falta algo, le falta mucho, no sé muy bien por qué pero no cuaja.