La ganadora del Oso de Oro a la mejor película en Berlín 2010 llega al Festival de San Sebastián. Todo un lujo si se tiene en cuenta que llega de un festival muy reconocido y que suele ofrecer también películas de corte muy independiente y un cine de autor con el que yo personalmente estoy muy concienciado. Su director es Semih Kaplanoglu quien además participa como guionista del film. Entre sus películas podemos encontrar otras con títulos de una sola palabra como Huevo o Leche. Muy curioso.
Es un coproducción entre Turquía y Alemania y tiene a priori todo el perfil de película austera, de ritmo lento y con moraleja. Es decir, una de estas fábulas que ya sólo se leen en los libros antiguos, historias tan humanas que han pasado de generación en generación en muchos pueblos del mundo y que siguen conservándolas a pesar de los tiempos modernos.
De todas formas y a pesar de que venga con una medalla desde el país germano no voy a darle las cuatro estrellas en mi precrítica ya que me temo que a pesar de ser una bella historia, muy metafórica y llena de simbolismo. de valores y que al público le encantará parece que puede quedarse en una cinta excelente pero que no cuenta nada nuevo, nada innovadora. Puede quedarnos la sensación de haber visto muchas como ésta. Precisamente es esa idea a la que me encantaría no llegar después de su visionado. Me gustaría subirle la nota, aver qué hace para conseguirlo.