Con un título que era de esperar tuviera moraleja o mensaje, Happythankyoumoreplease sube un escalón por encima de los títulos más típicos de Adam Sandlers y Stillers de turno con un resultado satisfactorio si encontráramos este film en la cartelera ordinaria. Su visionado en un festival puede generar dudas respecto al nivel de la edición del presente año pero, tiene que haber pelis para descansar, para ponerse la chaqueta por encima, para sentirse como en el sofá de casa. Objetivo conseguido.
Happy...es una comedia dramática convencional norteamericana llena de tópicos y mensajes optimistas yankies sobre la vida alrededor de uno de los personajes favoritos del Hollywood: New York. La capital del mundo sostiene el guión de la película, lo es todo. El rollito urbano progre, las cervecerías muy al estilo Europa, esos apartamentos que nunca tendremos y que sólo vemos en estas películas, el propio lenguaje visual de la ciudad...pinta y decora el largometraje. La verdad es que es agradable verla así, uno se siente seguro.
Su director, Josh Radnor, hace de él mismo en su faceta de actor y como director maneja la cinta sin ningún truco ni nuevo enfoque cinematográfico, es más, la peli toda ella está llena de tópicos de comedia romántica con un estilo muy usado. Eso sí, esta tiene algo más de contenido, tiene conversaciones algo más "profundas" diría yo. Intenta salirse de la cómoda versión positiva de la vida americana y sacude un poco la historia con varias escenas dramáticas no mal llevadas. Además de New York, es la clase media activa otro de los personajes inanimados que utiliza Radnor. Todo pasa rápido, uno no se pierde, el ritmo es rápido y hay buenos momentos para la risa floja incluso para la pequeña lagrimita. Se le permita a Radnor por esta vez, se ha esforzado tirando de peli prototipo para hacer un largometraje que intenta salirse de lo comercial con un rollito progre. Nada nuevo pero entretenida. Llegará pronto a las salas y gustará.