No he podido evitar acordarme de Hotel Tívoli, aquel desdibujado intento de hacernos pasar un buen rato con diferentes historias entrelazadas por un mechero. Y es que es difícil, que una película de pequeñas tramas funcione a la perfección, y quitando casos como la deliciosa Paris, je t´aime o Crash (cada una en su estilo) que me vienen ahora a la mente, la mayoría suelen ser, vamos a decirlo claramente, aburridas.
Así que nos encontramos ante otra cinta española que intenta arriesgar, tomando un camino diferente a la linealidad de una historia. El resultado está por ver, pero mucho me temo que habrá mucha buena intención, muchas ganas de hacernos reír, pero pobre resultado.
Escrita y dirigida por los debutantes Peris Romano y Rodrigo Sorogoyen. Sin embargo, el reparto está plagado de caras conocidas: Fernando Tejero (El club de los suicidas), Verónica Echegui (Yo soy la Juani), Arturo Vals (Casual Day), Adriana Ozores ( El método) y hasta Belén Rueda (El orfanato).
Por mas quiera desear ver cine español del que solo pido que me quite las penas durante un rato, no sé si este será el caso. Veremos.