Toma signos y luz y tinieblas para la juventud menos determinada por la edad de todos los tiempos, quiero decir, que es un film para adolescentes pero que la inmensa mayoría no pondrá los ojos en esta secuencia de heroicidades de la mano de una historia no demasiado original.
Un jovencito y su búqueda, un querrero elegido, más y más de lo mismo sin demasiada profundidad, donde la aventura está servida pero sin mucho mérito ni guión, Harry Potter al menos juega con otros condicionantes, el revoltijo de sensaciones de un personaje que avanza con los acontecimientos, y no un mero chaval al que se le ponen las cosas fáciles a las primeras de cambio.
La destreza de la cámara o los efectos especiales no creo que sean motivo de duda, es más cumplirán con relajación sin emolumentos extras, es el guión lo que acabará por decidir si es un film también para adultos, o si es lo suficientemente bueno para pertenecer en el recuerdo del cine, mucho me temo que esta no.