La última película del director Gus
Van Sant, Restless, abre mañana la sección Una cierta
mirada en el festival de Cannes. Esta sección tiene ya casi
tanto prestigio (o más en algunos círculos) que la propia sección
oficial. El director estadounidense ya es un veterano del festival,
donde ganó la palma de oro por Elephant.
Van Sant siempre ha alternado proyectos
de corte más comercial (como la reciente Mi nombre es Harvey
Milk) con otros proyectos más extraños y personales, como
parece que será en este caso. Nos contará otra historia de
adolescentes, donde la muerte tendrá una doble presencia, incluyendo
incluso algunos elementos sobrenaturales.
Personalmente no soy un gran admirador
del director, aunque admito que, cuando quiere, puede. Sin embargo,
no creo que esta vaya a ser una de sus mejores películas. Pienso que
pecará de tener demasaidos lugares comunes del cine americano más
independiente. Pocos personajes y muchos espacios en blanco que
deberían ser rellenados por un guionista novato, Jason Lew.
Para el papel principal, la Alicia de Alicia en el país de las
maravillas, Mia Wasikowska,
una actriz que puede dar que hablar, ya que está en un montón de
proyectos.
Quien
más puede aportar es el excelente director de fotografía, Harris
Savides, pero no creo que
compense un guión demasiado parecido a otros que también pretenden
ser originales.