Pasó por Cannes y tuvo una buena acogida esta película argentina.
Lo sé fui injusto con el cine argentino en mi crítica de “El camino de San Diego”, no todo es corralito y Maradona, no todo son diálogos interminables e imagen sucia. También hay películas como esta, de Adrian Caetano, un viejo conocido del festival que ya ganó el premio made in spanish con “Bolivia”.
Dos actores consistentes: Rodrigo de la Serna, el compañero de moto de Gael García Bernal en “Diarios de motocicleta” y Pablo Echarri, el argentino de “El método”. Ambos han demostrado ser unos actores sólidos que ofrecerán la seriedad que necesita esta película.
Y la necesita porque aborda una situación política adversa. Se trata de un thriller que podemos dar por seguro tendrá sus dosis de lágrima en los momentos claves, que estará filmado y firmado con garbo y mano firme por Caetano y que seguramente nos dejará con la sensación de haber visto una buena película.
Así sí. Le digo sí al cine argentino. No se si tendrá la culpa su producción y nuestra distribución pero no llegan demasiadas películas como esta de allá. Aprovechémosla.