¿Pero por qué sigue habiendo propuestas como ésta? Es algo que no puedo llegar a entender, ni siquiera desde una lógica financiera. ¿De verdad son productos rentables? Y encima las distribuidoras la estrenan con un título que trata de ubicarla en el mismo sector que Superfumados y otros productos similares. Lo más sorprendente es que se trata de una comedia inglesa. No entiendo por qué la comedia inglesa en vez de ir a lo suyo, copia los clichés americanos. No les hace falta en absoluto. Me vienen a la cabeza dos estupendas y locas comedias inglesas, como son Shawn of the dead (horriblemente distribuida en España como Zombies Party) y Arma fatal. Dos comedias con mucho gancho, que tuvieron una distribución horrible pero que aún y todo resultaron rentables. Incluso a raiz de éstas comedias, a los americanos se les ocurrió copiar la comedia inglesa.
Y es que me parece que mientras el cine siga secuestrado por las distribuidoras, los cinéfilos de provincias sigamos sin poder elegir qué queremos ver y qué no, e internet no ofrezca una alternativa legal a las descargas, seguirá siendo difícil que la recaudación de una película tenga una relación directa con lo que esa película gusta o interesa a los espectadores. ¡A las barricadas!
Una propuesta totalmente alejada de todo aquello que ofrece gente como Simon Pegg. Subproducto para idiotas. Insisto, no vayáis a verla.