Crítica de la película Winky y el caballo mágico por William Munny

Sí, Noruega es el país que nos trae esta película que no engaña demasiado, es tal y como parece, un bonito contar de niños buenos aprendiendo cosas buenas y con caballo incluido. Las típicas escenas de siempre que nos podemos imaginar pero con la especial actitud del país frío y curioso que la secunda.

Muy idónea para los más pequeños, sin pretensiones pero mucho sentido y conocimiento del espectador que la contempla, será un no peligroso lago en el remanso de cine infantil acelerado que suele rodear la cartelera. Hablan muy bien de su pequeña protagonista, una debutante que ha gustado mucho en general. Lo que no parece tab idóneo es la época del año enla que se distribuye, y sino pasen y bean tipos con barba blanca.