Es una obviedad que el cine coreano tiene el billete más que ganado para viajar a San Sebastián las veces que quiera. Ya son unos cuantos años seguidos los que vienen repitiendo y además suelen ofrecer temáticas un tanto variadas, desde la versión más ligth del terror sicológico, la comedia o los dramas al estilo Corea más clásicos. En esta ocasión entra a formar parte de la parrilla de salida en la Sección Oficial la película Akmareul boattda, un thriller sicológico que incluye tiros, sangre y dolor humano. La verdad es que invita a verla porque se sale un poco de la norma del clásico film más tranquilo y reflexivo y porque los tiros en pantalla grande y con una sala a revosar le recuerdan a uno su infancia y los títulos que una y otra vez vemos a pesar del paso del tiempo.
Kim-Ji woon es el director de la cinta, un hombre al que en varios de sus anteriores trabajos ha demostrado gustarle la sangre en un sentido estrictamente cinematográfico y ha recibido buenas críticas por estos trabajos. Sin duda es una opción menos festivalera y es perfecta para distanciarse un poco de lo herméticas que pueden parecernos otras a concurso y disfrutar de la acción más tradicional y pasar un buen rato. Me huele un poco a palomita pero ya saben que en el Festival de San Sebastián están prohibidas. Así que no será para tanto.