No voy a esperar demasiado de una película que tiene en la acrobacia un punto principal. Jackie Chan se merece un respeto bien por su talento propio, bien por lo que trabajó para mantener la industria en Asia a una vez que se introducía en América con fructuoso premio.
Aunque no sea una película que siga las doctrinas de anteriores registros de una saga de policía que ya realizó, la película será justa y poco seria dejándose llevar por los repetitivos pero distintos planos de pelea interminable.
Ya es mayor, ya son muchas películas, y las que vendrán.