Es que de buenas intenciones está lleno el mundo pero... esta no va a llegar a lo grande de todas. Es cansino volver a elegir la historia repetitiva de un bandido especial, porque hay muchos, y mucho menos llenando la pantalla de tipos reconocidos y que llaman a público. Rush, Bloom y Ledger solo son un mero trámite para atraer y la historia una comparsa aderezada de cuatro momentos de acción poco espectacular para que intentemos creer en resolver injusticias en un mundo justo. La eterna historia de Robin Hood pero sin honor de por medio, porque estas historias son lentas y de domingo tarde perdido en la memoria. Pasable, ese es su epígrafe.