Su mismo planteamiento ya me produce desinterés. Un hecho
real, conocido, que conmovió a la sociedad americana; y para llegar a él se
presenta la vida previa de la víctima. Me provoca desinterés, primero, por manido, por
ser un mecanismo tan conocido que no sorprende en ningún momento. Ya lo hizo
Gus Van Sant en Elephant y después lo
han repetido muchos otros. Pero principalmente, porque no aporta nada a la
cuestión principal. La brutalidad policial - extremísima en este caso- es
inaceptable independientemente de que la víctima sea una bellísima persona o el
mayor hijo de puta. Lo que se hace en la película con la beatificación del
protagonista, es en muchos aspectos reprochable.
Para empezar, porque resulta poco creíble. Se quiere buscar una
situación simple y carente de la más mínima polémica, para que sea recibida
como una papilla fácil por la conmocionada sociedad americana, que parece solo
querer ver una película de planos personajes buenos y malos. El público así lo
aceptará bien y si se puede, se rascará un poquito el Oscar. Todos podremos
sentirnos mejor y aparcar el suceso. Y esto es tanto así que el personaje
principal se estropea, porque tiene que resultar tanto un santo (con el perro, con su
madre, con su pareja, con la chica del súper, con las drogas...) que después sus
arrebatos de ira y amenazas son completamente disonantes. Pero es necesario
porque esto es un producto tan simplón que necesita un héroe sin peros.
Hay algo que me molesta aún más en esta cuestión. El repugnante
mensaje que se esconde detrás de esta necesidad de héroe. Parece que cuanto más
bondadosa sea la víctima más terrible es la brutalidad policial. Y claro, en el
reflejo de esta idea se encuentra otra más oscura y muy del gusto de cierto
sector de la sociedad americana: si fuera un hijo de puta, el hecho estaría
algo más justificado. Horrendo.
Por lo demás, un discurrir de escenas para contarnos lo majo
que era este chico, increíbles y anodinas; para terminar en unos veinte minutos
-desde el incidente- con verdadero interés. No compensa.