Interesante intento de reflexión por parte de Antonio Campos, newyorkino de habla inglesa, que tratará de hacernos llegar la idea de la nueva importancia de los medios digitales en la grabación de imágenes, a través de un colegio y los acontecimientos que rodean a un chico con cámara en mano.
Probablemente con necesidades de varios formatos de grabación, un tono sencillo al ser alrededor de un mundo adolescente y querer llegar a él aparte del mundo entero del adulto, puede que se trate de algo digno de elegir como cita, aunque al final sólo se trate de algo anecdótico, y olvidadizo. La profundidad con que pueda tomar el tema, con muchas espectativas de comienzo, aviso, serán las que la historia concreta le permitan y quizás no tanto la que se refleje en la realidad cotidiana de un mundo mucho más extenso que las cuatro paredes de un internado colegial.
De esas películas que al final se quedan a medias, es probable que la coja con ganas y me vaya desinflando, aunque se agradecen este tipo de esfuerzos por ahondar y además hacerlo a través del cine, sin embargo hay que pensárselo bien antes de entrar en la sala, la cartelera ofrece mucho más y mejor.