Barrio madrileño de Chueca. Gays y ancianitas. Humor negro. Si, es cine español del que muchos pueden echar pestes desde un principio.
Centrémonos. Nos hallamos ante el primer largo de Juan Flahn, que anteriormente había sido guionista en títulos como Alma gitana o Insomnio (las dos al lado de Chus Gutierrez) o de series de televisión como Canguros y Ana y los siete (de algo hay que vivir).
La historia está basada en un cómic con el mismo nombre, de un estilo muy parecido a “El hombre deseado” que también acabó en película. Flahn ha intervenido en la adaptación del guión, junto al tandem formado por Dunia Ayaso y Félix Sabroso, responsables de otras comedias como Perdona bonita, pero Lucas me quería a mí o Descongélate.
Con estos antecedentes, se podría decir que va a ser una comedia que intentará ser fresca, con el universo gay por bandera y con un trasfondo que querrá contarnos algo más de lo que a simple vista nos ofrece. Lo malo es que se perderá en situaciones rocambolescas y escenas incongruentes, no aptas para todo aquel que no tenga un sentido del humor demasiado exigente.
Un reparto para todos los gustos. Grandes nombres como Rosa María Sardá (Vete de mí) y Concha Velasco (Bienvenido a casa), o no tan grandes pero que siempre que suena como Pepón Nieto (Descongélate). Otros que se quedaron en promesas como Carlos Fuentes (Taxi), fenómenos televisivos como Eduard Soto que interpretaba a El neng o no tan fenómenos pero igual de televisivos como Pablo Puyol (Un paso adelante). Pasen y elijan.
Divertida, seguramente. Que tendrá unos altibajos considerables en su ritmo, seguramente tambien. División de opiniones entre “entretenida” e “insulto a la inteligencia”, eso lo puedo firmar ya. El cine español, es lo que muchas veces ofrece. Me decanto porque acabará por defraudarme. No será tan terrible como Locos por el sexo o La máquina de bailar, pero creo que un mal sabor de boca me dejará.