Lo cierto es que hacía tiempo desde que un dibujo comercial me sacaba de mis casillas en el cine por aquel entonces en el que Shrek salió a las pantallas. Resultó muy fresco, para adultos y niños, con los tiempos que corren, y talentosa en la composición de sus conversaciones y personajes rescatados de lo clásico.
La majestuosidad de su ritmo y trabajo me animó a acercarme a este personaje en espera de una segunda parte que desde luego creo no tendrá que envidiar mucho a la segunda más que en la novedad.
Espero sinceramente que no se dejen su talento para con la primera en la neblina de la obligación popular de crear una secuéla, con que esta sesión no sea tan solo una continuación sino otra aventura que nos embriage más de lo verde estará perfecto.