Quizá me excedo en optimismo, pero para aquellos que disfrutamos de lo lindo de esa familia imposible que eran los Tanenbaums, el hecho de que su director y guionista estrene nueva película es motivo suficiente para otorgar la puntuación máxima. Luego vienen los chascos pero así es el cine.
Wes Anderson, ese es el pirado que estaba a cargo de The Royal Tanenbaums. Ahora nos ofrece La vida acuática de Steve Zissou, repitiendo con el incomparable Bill Murray, esta vez en el papel protagonista. El argumento mejor guardármelo, por surrealista, tan solo diré que Murray interpreta a un oceanógrafo en una misión subacuática.
Para aquellos que busquen cine diferente, de esos que se salen del cauce habitual pero sin caer en el tostón pseudointelectualoide, esta puede ser una buena oportunidad. Con un poco de suerte volverá a ser una refrescante brisa desanquilosadora. Que luego podemos ver cine clásico como Million Dollar Baby, pero de vez en cuando está bien recordar que no todas las películas tienen que ser iguales.
Además tenemos en el reparto al habitual colaborador de Anderson, Owen Wilson, que esta vez no le ayuda con el guión. Pero tenemos también a la importantísima Cate Blanchett (Hepburn en El aviador, Galadriel...), Angelica Huston que repite también con Anderson, Williem Dafoe, Jeff Goldblum... lo mejor de lo mejor. También Michael Gambon (el nuevo Dumbledore en Harry Potter).
En definitiva, no puedo sino animar a todos a ver esta película, que en el peor de los casos, suponiéndome equivocado en mis alabanzas, espero sea divertida.