El melillense documentalista con cierta fama Driss Deiback (Natural de Melilla o Las Melillas), nos presenta otro producto centrado en el interés por mostrar más sobre el cruce de culturas, tratando de acercarnos a los combatientes marroquís de la Guerra civil española.
No podemos esperar demasiado de una cámara sencilla sin demasiado presupuesto, pero sí, de la sensibilidad y seriedad necesarias para juntar un sólo alma que nos consiga atrapar en las garras del pensamiento. Será difícil que nos enganche, la palabrería nunca fue un lujo que destacar en el intrés del espectador casual, pero al poco tiene pinta de hacernos reflexionar y gozar con imágenes, que no es poco.