El viernes 6 de agosto se estrena la superproducción "Catwoman".
Se puede decir que esta película entra en ese género de películas que vienen como consecuencia de la aparición de un personaje en otra película. Catwoman apareció en "Batman 2", encarnada por una felina de cuero Michelle Pfeiffer. Ahora ella sola es la estrella y protagonista de una película. A este género pertenece también la película "El rey escorpión", que ya había aparecido como personaje secundario en "El regreso de la momia".
En esta ocasión, Catwoman será la explosiva Halle Berry, esa aprendiz de actriz que tiene un Oscar en su haber y no sabe ni cómo ni porqué por la inefable "Monster's ball". Y digo explosiva porque parece que es lo único que se intenta subrayar en esta película. ¿Qué hombre no ha soñado ya con el traje de cuero que se enfunda Halle Berry?
Así que tenemos una nueva película sobre un comic, y más concretamente, sobre un personaje de un comic, que tiene unas curvas espectaculares y que se enfrentará al malo o malos de turno con increíbles efectos especiales y de movimiento. ¿Y a mí qué? ¿Es esto todo lo que me va a ofrecer el genial Pitof, director de esta película, en su segunda película tras "Vidoq"? ¿Ha llegado ya el momento de colgar para él la chaqueta de cineasta creativo para venderse a la más rancia industria?
¿Por qué? ¿Qué necesidad había de hacer esta película? ¿Por qué siento que ni me voy a divertir?
Con suerte, nos vemos en el videoclub dentro de seis meses.