Crítica de la película Cerrando el círculo por Iñaki Ortiz

El veterano director Richard Attenborough ha filmado películas como Gandhi o Grita libertad, además de ser un actor con una amplia filmografía. Siempre es respetable un estreno suyo y hay que tomarlo con interés, aunque también es verdad que hemos visto últimamente alguna de sus películas que deja un poco que desear, Búho gris y En el amor y en la guerra.

Creo, sin embargo que este nuevo film va a ser más interesante. Eso sí, tan convencional como vienen siendo sus trabajos anteriores, que según va pasando el tiempo y mientras el cine progresa, siguen en el mismo punto del principio. No vamos a esperar tampoco que esta situación cambie a sus 84 años, no es momento.

Uno de los puntos más interesantes de esta película es su reparto. Dos actores tan veteranos como el director. Shirley MacLaine no necesita presentación. A su edad sigue trabajando, hace poco la hemos visto en Dicen por ahí y En sus zapatos. Por otro lado, Christopher Plumier, un actor habitualmente secundario con menos fama que MacLaine, pero que últimamente está trabajando en proyectos más interesantes que ella, como Plan Oculto o la reciente Emocional Arithmetic que ha participado este año en el festival de San Sebastián.

El film ha estado en el festival de Toronto, aunque ya empieza a ser habitual decir esto debido a la cantidad de películas que se proyectan en ese festival. Una historia ambientada en el presente en la que aflorarán recuerdos del pasado, representados en un anillo.

Una película que, seguro, tendrá buen gusto y buenos momentos emotivos. Para los menos aventurados.