Super 8 es la película que ha juntado a dos monstruos del cine, pero de distintas épocas, uno Steven Spielberg (Tintín y el secreto del unicornio y War Horse) y el otro J.J.Abrams (Star Trek XI o productor de Monstruoso), que van a lograr con sus capacidades una película distinta, creo que misteriosa y atrayente, con el mundo alienígena de por medio, y a la vez para toda la familia.
¿Por qué tendría que ser esta una película distinta? Porque J.J. Abrams no dirige más que cosas que tienen el apoyo del sector mayoritario de las butacas y produce género más concreto, y para lograr un guión de los de siempre, de los de gustar a casi todos, ha hablado con Spielberg y este ha dado el visto bueno. La presencia del protagonismo de niños en la historia es la que asegura que nos libremos de las chorradas de ciertos héroes de la nueva era que mejor si no hablaran, algo avanzamos, y después, logramos un clima de aventura, peligrosa, que haga del film una especie de piscina donde mucho puede funcionar sin necesidad que sea especialmente realista.
Y esta es la que creo que va a ser la película que presento, un film capaz de volver a la narración más serena, con apuntes de cine espectáculo pero por encima de todo proponiéndonos una serie de pautas de siempre que la convierten en algo divertido e interesante, más que en algo meramente espectacular por que sí. Y ojo que no descarto alguna que otra cosa que haya que pasar por alto, pero en los tiempos que corren hay que hacer oídos sordos de muchas cosas en las película potentes y de comercio porque sino no volverían a las salas los más puristas.
Es posible que este film un par de años más tarde sea visto en la sobremesa de las cadenas de televisión más potentes porque sabrán que cuenta con el beneplácito de la mayoría del espectador deseoso de siesta después de una comida opípara, lo que viene siendo cine para todos.