Nacho Cerdá por fin culple su sueño de hacer un largo. Para todo cineasta es difícil abrirse camino hasta llegar a conseguir la confianza de los productores y hacer una película. Él viene del mundo del corto. En él, siempre trabajó con temáticas cercanas al fantástico y al terror.
En su largo no podría ser menos: Los abandonados es una película de casas encantadas donde asistiremos, por desgracia, a lo mismo de siempre.
Entiendo que para el señor Cerdá, haberse visto decenas de películas sobre casas encantadas y dar en ésta película su visión del tema, trabajar los mecanismos, etc. le haya aportado mucho. Pero el espectador está harto, no va a pasar miedo y, tras aburrirse mucho, tendrá la sensación al final de haber visto la película de siempre. Finalmente olvidará la película y con él, posiblemente, al propio Nacho Cerdá.
Como decía al principio, abrise camino en el mundo del cine es jodido, pero si lo tratas de abrir con casas encantadas puede serlo mucho más. Espero que me equivoque y deseo que la película triunfe, etc. pero lo dudo.