Voy a ser pesimista con ésta película. Pese a que su argumento se sale del típico argumento de comedieta italiana, pese al esfuerzo de ambientación (la película transcurre en 1814) y pese a la presencia de Napoleón (y con esto espero no estar desvelando la trama), no creo que consiga el tono necesario para ser una buena comedia europea. Su argumento necesitaría de un sesudo guión lleno de fina ironía. Por el contrario, creo que tendremos humor italiano. Que me disculpen nuestros lectores italianos, si es que hay alguno. Pero creo que el humor italiano suele ser tan malo como el drama español. Repetitivo, aburrido,... una tontería.
Seguramente éste argumento estaría mejor en las manos de Wes Anderson o, incluso, en las de Charlie Kauffman, dos personas mucho más capaces de sacarle jugo a ideas surreales. Por el contrario, ni el director ni los guionistas de ésta película parecen invitar a la esperanza. Lo más destacable del plantel es Monica Belucci que, aunque quizá no sea una valoración muy cinematográfica, está güigüena.
En definitiva, hay que reconocer el esfuerzo de ambientación, el esfuerzo por buscar una idea diferente... hay que agradecer el esfuerzo. Pero creo que habrá esfuerzo y pocos resultados...