Crítica de la película Si de verdad quieres... por Olmo

No es una película sobre el amor en el sentido literal de la palabra. Y tampoco es una película de amor. En consecuencia, esta no es una comedia romántica. Pero sí se trata de una comedia al muy estilo hollywood pero esta vez las estrellas llevan arrugas. Si de verdad quieres es la última apuesta de David Frankel, un asiduo a las comedias ligeras, producciones más bien caras y que con El diablo viste de Prada alcanzó su particular cenit. También, este es el último trabajo de dos arrugados (con mucho cariño) que no necesitan mirarse al espejo para saber que están guapos artísticamente. Ellos son Meryl Streep y Tommy Lee Jones. Además, se proyectó en el Festival de San Sebastián hace escasos días y cuenta con ese lanzamiento últil que siempre es bienvenido.

Puede uno llamarse a engaño y pensar que este es un trabajo hecho para el espectador más adulto. Si bien esto tampoco es mentira desde luego que es de esas que acapara más de un grupo de inseguros y edades diversas por títulos que dan más miedo que otra cosa y deciden ir a por lo conocido. Para eso está hollywood  que diría aquel. La comedia está asegurada, el cine no tanto. Las interpretaciones no las pongo en duda. Un rato divertido, guasón y amable alrededor del invento más antiguo y menos tangible de la condición humana.