Crítica de la película Mi vecino Totoro por Obi-Wan

Los reestrenos de títulos antiguos son cada vez más habituales,  desde las versiones mejoradas como la saga de Star Wars a las más recientes Mishima o Ashes of time, o reposiciones en 3D como Pesadilla antes de Navidad o Destino final por ejemplo. El caso que nos ocupa nos llega de la mano de Aurum con una emblemática cinta de los estudios Ghibli (cuyo logo es una de los personajes de esta película), por tiempo limitado y coincidiendo con el  primer lanzamiento en dvd de una serie de títulos inéditos en este formato en nuestro país, que se inicia con Susurros del corazón (1995) a los que le seguirán Porco Rosso (1992)  o Guerreros del viento (1984), de la cual aún guardo celosamente un vhs en casa.

 Dirigida por el gran maestro de la animación Hayao Miyazaki ( El castillo ambulante, Ponyo en el acantilado), estamos ante otra fábula fantástica, dónde elementos habituales del cine de este realizador como la magia, el respeto por la naturaleza y los espíritus de la tradición japonesa estarán presentes. En esta ocasión el tono más trágico de otros trabajos suyos como La princesa Mononoke dejará paso a un punto de vista más infantil, pero no por ello menos atractivo si se sabe mirar con otros ojos la belleza del mensaje.

 Hermosa, tierna y divertida. Un producto que no defraudará si lo que no estás buscando es cine realista y sombrío. Si bien quizá no estará entre las obras mas destacables de Miyazaki, su calidad queda fuera de toda duda viendo de dónde procede. Una ocasión excepcional para que disfruten de buen cine los más pequeños y para dejar volar la imaginación y rejuvenecer la mente unos cuantos años los más adultos.