Crítica de la película Resistencia por Olmo

Supongo que todos lo que comiencen a leer estas humildes líneas esperan que lo haga presentándola con esas impresiones básicas, iniciales y evidentes que me evoca en primera instancia un film. Sin embargo, en esta ocasión quería rendir tributo a un director que no es demasiado conocido en el altar mayor hollywoodiense. Hablo de Edward Zwick, director de Leyendas de Pasión o El último Samurai entre otras. Hablo de un director que sabe hacer cine de una manera que siempre recordemos sus películas. Por cualquier razón todo el mundo recuerda Leyendas de Pasión con gloria o Diamante de Sangre con esa espectacularidad que le caracterizó. Por eso, mis primeras líneas para Zwick. Siempre lleva a un actor líder que engancha al espectador medio.

Ahora sí, toca hablar y escribir de cine, de lo que nos vamos a encontrar. Será ese estreno del viernes con mucho público. Hay ganas de verla porque no hay demasiado cine comercial apto para la compra de una entrada. Y una de las razones que la llenarán de gloria en sus primeros pasos por la cartelera será su temática. Hablar en el cine de la gran guerra europea bis no es ninguna novedad pero gusta. Porque más allá de las gruesas tapas del libro de historia más convencional que la envuelven, el cine convierte los episodios de esta segunda gran guerra bis en algo ameno, divertido, incluso emocionante diría. La grandeza del cine una vez más.

Resistencia lleva en el título el hambre del espectáculo de las bombas, fusiles y guerreros con almas de héroes, de drama baratillo pero que rinde en pantalla, que gusta a las novias, a los muchachos que se empiezan a mover en la historia a través del cine.

Dejando atrás las especulaciones me toca dirigirme con mis palabras al reparto. Para el film Resistencia necesitamos a un semigrande ( considerado por el público en general como un actor de moda, famoso...) que sin necesidad de ser un coloso en la gran pantalla ( y este es el caso) coordine muy bien el concepto de este producto, es decir, vender la marca. Y en esta ocasión la marca es Daniel  Craig ( Munich). Este chico Bond me revuelve las tripas por muchos motivos. Pero es la marca de esta cinta. La gente irá a verla porque será " esa que sale el que hace de James Bond".

Iré a verla porque es la peli de marca resultona después del atracón navideño no cinematográfico. Y porque vivir la historia a través del cine siempre me ha parecido una de las experiencias más apasionantes de las que podemos disfrutar como seres humanos.