A la hora de la verdad, cuando la conclusión y devenir de la historia ha de complacer las necesidades de un público que entiende la exageración y los chistes con situaciones estúpidas, la película se desvanece, hace aparecer un policía y unas casualidades fuera de la lógica de un buen desarrollo y su conclusión, y se marcha creyendo haber satisfecho una serie de necesidades de film de divertimento. Me he divertido pero solo pido algo de rigor, aún en esta película, ya sé lo que voy a ver, pero los guionistas se encargan de que ni siquiera eso me anime al encontrarme chapuzas para arreglar un final. El hijo extraño es una auténtica falta de ideas.
Por otro lado Dustin Hoffman está inmenso, la Streisand con un muy buen nivel y DeNiro mantiene las formas en un guión forzado. Ben Stiler hace lo que puede en una película en la que cree ser protagonista pero no lo es.