Crítica de la película Réquiem (El exorcismo de Micaela) por Iñaki Ortiz

La nacionalidad alemana siempre da una cierta seguridad a la hora de escoger un título. En este caso nos encontramos ante la historia de una joven, en un ambiente de teen movie serio, que camina entre el drama y el terror a punto de huir de la realidad. Me recuerda en este sentido a la reciente y sobrevalorada “El exorcismo de Emily Rose”, pero visto desde una óptica mucho más realista, seria y menos efectista. Más alemana y menos americana por resumir.

Tenemos una película de festival. Se ha hecho un buen tour recogiendo premios por una serie de festivales. En concreto, parece que lo más premiado es su actriz, Sandra Hüller, quien ha sido galardonada en la pasada edición del festival de Berlín o en la reciente del festival de Sitges. Precisamente en Sitges no tuvo demasiado buena acogida, seguramente por un bajo o quizá inexistente, contenido fantástico.

Su director, el alemán Hans-Christian Schmid ha conseguido otros premios con sus anteriores trabajos, variopintos, donde ya había tocado el tema de jóvenes con problemas y donde también podemos encontrar asuntos tan diferentes como el de un grupo de Hackers.

Confío en encontrarme con una película interesante y, tirando al típico tópico del cine alemán una vez más, sobria y de calidad con buenas interpretaciones, como por ejemplo otra película alemana que también estuvo en Sitges con mejor palmarés, Grimm Love. Al igual que con esta otra no creo encontrarme deslumbrado. Y, eso sí, confío encontrarme un retrato juvenil más cercano a Gus Vas Sant que al destajista de turno de las películas de jóvenes que acostumbran a hacernos tragar.