Al fin llega uno de los acontecimientos cinematográficos más esperados del año: la nueva película de Pedro Almodovar. Se podría terminar aquí mismo la precrítica. Pero al nombre del director manchego, que es sinónimo de buen guión y buena dirección, añadámosle también la banda sonora de Alberto Iglesias, la presencia de Javier Cámara y el debut como "Chico almodovar" de un actor que está prometiendo mucho, Gael García-Bernal. Vamos, que en definitiva todo son buenos basamentos para un ilusionante edificio más en el especialísimo barrio Almodovar.
Aunque sin duda, la mayor lección que va a dar a todo el mundo con esta película es que él es un director íntegro de los pies a la cabeza, y, que por mucho que le lleguen ahora alabanzas desde la Meca del Cine, él no está cometiendo el error de irse a rodar películas americanas, como en su momento hizo Trueba, por ejemplo. Por ello demos gracias a él por ser tan íntegro y tan consciente de que su cine forma parte de una cultura, de un tiempo determinado, de todo eso que él tan bien sabe mirar.
Por todo ello y porque ya hace muchos años que hicimos los votos de devoción hacia su cine, TODOS NOS VEREMOS EN EL CINE.