No tiene mucha salsa esta postcrítica así que no me extenderé.
Sus virtudes: sería, humana, sensata, moral y sobre todo, tiene mucha fuerza. Fuerza en el sentido de sentir la calle y la casa, y todo lo que pasa.
Sus defectos, básicamente dos. Hacia el final se desdibuja un poco la personalidad de los protagonistas a favor de ajustarse a los hechos reales (esto le hace preguntarse a uno si estaban bien plasmadas las personalidades). Resulta un tanto incoherente, pero tampoco es demasiado grave.
Lo que sí es demasiado grave es el otro defecto: le sobra una hora entera. Realmente no había argumento para más de hora y media, y dura casi dos horas y media. Hay mucha paja, que sin duda está a conciencia para darle un tono de mayor realismo a la película, contándonos hasta el último detalle, pero básicamente lo único que aporta esto es aburrimiento y pérdida de interés. La transformación de la situación está bien tratadas gracias a esa cantidad de escenas vacías, pero no es suficiente razón para plantarnos esa duración.
Con hora y media habría sido una gran película. Con su duración actual no tengo ganas de volver a verla.