Crítica de la película Watchmen por Iñaki Ortiz

Watchmen de Alan Moore, es para muchos el mejor comic realizado hasta la fecha. Yo no soy un experto como para hacer tal afirmación, pero es verdad que es una obra muy apreciable. Era inevitable que antes o después llegara al cine. Después de dar mucha guerra, eso sí, aunque no voy a hablar ahora de los líos legales de la Warner y la Fox.

Se han descolgado de este proyecto gente tan interesante como Tom Cruise o Jude Law, y quizá la mayor pérdida ha sido la de Darren Aronofsky, quien estuvo a punto de dirigir esta película. Con él,  al menos, hubiéramos tenido una garantía de fidelidad, no al material, sino a sí mismo, sin concesiones a la taquilla. Con Zack Snyder, su director final, no tenemos esa garantía. Seguramente querrá ser fiel al aspecto visual y calcará las viñetas en la pantalla con gran maestría, como ya hizo con su anterior película, la exitosa aunque mediocre, 300. Pero difícilmente será fiel a la esencia, y lo peor es que no será por motivos artísticos de adaptación, sino por construir un producto de más fácil consumo para todos los públicos. Hay que reconocer que es una empresa difícil, no por la duración de la película, suficientemente larga y adecuada, en contra de lo que opinan algunas voces, para abarcar la narración original. La dificultad está más en conseguir limar ciertos aspectos que con una imagen real pueden resultar ridículos, y en plasmar bien el tono.

Lamentablemente, no tenemos unos buenos guionistas para trabajarlo, se ha recurrido a un destajista del mundo del comic, David Hayter, y otro guionista primerizo, que curiosamente puede ser la mayor esperanza para decantar la balanza hacia la calidad, Alex Tse. Sigámosle de cerca.

El reparto es más bien pobre, y en concreto, la elección de Matthew Goode en el papel de Ozymandias, me resulta absolutamente inadecuada. Si creyera que se debe a un tono diferente del personaje, podría tener cierta esperanza, pero simplemente creo que es una cuestión de pobre elección. Necesita más carisma y una belleza más clásica y atlética, aunque eso hoy no venda revistas para niñitas.

En definitiva, si comparamos este proyecto con otro que también busca la adaptación de calidad del mundo del comic, la saga de Batman de Nolan, veremos una clara diferencia. Más allá de que Nolan sea muy superior a Snyder, vemos en esa saga unos créditos intachables en todos los ámbitos, mientras que aquí sólo veo dos nombres Zack Snyder y Alan Moore, y para colmo, este último ya ha mostrado su descontento. No basta.

En todo caso, visualmente será disfrutable, difícilmente será aburrida, y si se hace bien, puede ser una gran película. Siempre queda la esperanza, aunque me temo que tendremos una película bien asimilable para todos los públicos.