En realidad, resulta una atrevida apuesta por divertir, por exagerar un mundo de tiempos de otro siglo, con la mujer como protagonista y la fiereza de su psique desde siempre.
Y seguro que resulta entretenida, y hasta decente en muchos aspectos, pero el hermetismo de estas historias que no suelen gozar de demasiado capital para llevarlas a cabo, suele provocar que resulten justas. El siglo XVI necesita amplitud y opulencia, necesita de una monumental muestra y escaparate o al final estas historias se quedan con el regusto de justas. Y seguro que desde dirección se hubiera pretendido más, pero a no ser que una sorpresa me atrape, eso espero ver, poco más.
Prometedora y bien realizada seguro, me gustaron los anteriores trabajos de Iborra entre otros que ha dirigido, "El tiempo de la felicidad" y la serie televisiva "Pepa y Pepe".