Es curioso como el aprendizaje y la experiencia actúan ante una imagen, porque nadie puede negar que ver a The Rock en un gran cartel con cara amenazadora y un camión explotando detrás, es sinónimo de peli de acción tan espectacular como vacía. Puede que esta cinta, prometa más de lo que vaya a cumplir después, ya que nos hallamos antes un film basado en hechos reales y eso muchas veces, relaja la imaginación interminable y rocambolesca de los guionistas.
La premisa principal, típica, un padre intenta ayudar a su hijo infiltrándose en una red de traficantes, interpretado por Dwanye Johnson, que sigue siendo roca pero que sufre a la vez que golpea. Me descoloca la presencia en el reparto de Susan Sarandon. No se que hace aquí. En cambio Jon Bernthal, el compañero de Rick en Walking dead, encaja a la perfección en este mundo de matones. Escribe y dirige Ric Roman Waugh, con la experiencia de otros títulos de acción como La sombra del crimen o Felon.
Esto es lo que hay, nadie puede llevarse a engaño, a no ser que no haya la espectacularidad que promete su carátula.