Clerks fue película que dió a conocer lo que era Kevin Smith. Kevin Smith es un escritor de diálogos. No sabe hacer otra cosa. Resulta que también escribe la historia que envuelve a esos diálogos y que también dirige las películas... pero eso es secundario. Lo que él sabe hacer es escribir diálogos.
Seguro que ésta segunda Clerks no tiene la carencia de dirección, fotografía y audio (musica?) que tenía la primera. Seguro que tiene más presupuesto. Pero, ¿a quién le importa?
Si uno va a ver Clerks es para disfrutar de los diálogos, para esbozar sonrisas constante y una carcajada de vez en cuando. Si no, más vale abstenerse de verla.
Yo por lo menos iré encantado pero con las ideas claras.