Ya en mi precrítica comenté la importancia que yo le daba al título de una película cuando uno elige casi al azar rapidamente y no sabe qué ver. El resultado de este film en lo que respecta a su título es calamitoso. En primer lugar, que no era ni es atractivo, pero en segundo lugar es que conforme pasan los minutos (lentamente por cierto) intuyes la relación del título con la condición de ángel no bueno del niño hasta que al final él mismo dice "¿qué es un demonio sino un ángel caído?". Con un título como Whisper esos último momentos del niño hubieran sido de lo mejorcito, la punta del iceberg, la sorpresa. Sin embargo: Hellion, el ángel caído más veinte minutos de peli igual a el niño es un demonio, un ángel...
Empiezo con esto en primer lugar porque la calidad de esta película es muy baja. Y porque mi precrítica iba por ese camino sobretodo. En lo que respecta a la hora y media de cinta tengo que reconocer que mis bostezos no eran el resultado de una noche sin dormir. Lo eran porque este film ha sido muy cutre, con un ritmo que quiere atraparte en una historia que no arrastra ni al público ni a los mismos personajes. Un ejemplo. El señor Sawyer de Perdidos está en su elemento. Es Sawyer fuera de la isla. Y no voy a negar que no está del todo mal teniendo en cuenta todo los demás. Chico duro pero bondadoso que se ve arrastrado por la necesidad. Pero es que este registro de barbita de tres días, carita de malo y giro de cabeza dejando el cuerpo rígido ya lo hemos visto en Peridos.
Su rival, el ángel caído en forma de niño, se lleva la nota más alta en el aspecto interpretativo. El clásico corte de pelo de chico poco aceptado, la mirada directa y sus comentarios austeros pero inteligentes le hacen ser lo más intenso en las pocas fases más llevaderas de la película. En el aspecto técnico quiero destacar esa metáfora continuamente insertada en forma de planos vista aérea que nos intenta decir eso de que el niño es un ángel caído.
Como siempre se ha recurrido al aislamiento de los personajes, al secuestro, los secretos, la muerte de todos hasta quedar uno, la moral y sus límites en el personaje de Sawyer "Perdidos". Ni vacila, ni ataca, es un fracaso. Se detiene muy prontito y no tiene intención de salir del rincón hasta que suena la campana.