Las producciones ciematográficas del continente africano también tendrán representación en el Festival de San Sebastián del presente año. La película en cuestión es una coproducción entre Marruecos y Francia y el director de la misma es Daoud Aoulad-Syad y lleva el título de A jamaâ o La mezquita en su versión castellanizada. Acostumbrados estamos a las producciones de Irán y ya hace un par de años se animó Palestina con la película El cumpleaños de Laila. Este año Marruecos representa en gran parte a las iraníes clásicas que nos visitaban en los festivales de años anteriores. Lo que está claro es que será un reflejo cinematográfico de esas mismas.
En la precrítica de la película The White Meadows del año pasado ya analizaba pequeñamente cómo suelen ser las producciones de oriente próximo y de los países árabes. En esta ocasión se volverá a tirar del elemento, en este caso la mezquita a partir del cual la película gira en torno a ella y se cuenta una parábola con unos personajes que progresan y avanzan en el tiempo en cuerpo y alma y que sirve de alimento para este mismo. Sí, lo sé, parece una más y lo mismo de siempre. Pero tal y como pasa todo los años, tiene su público y su espectador fiel que disfruta viendo estas películas parábola tan interesantes, de eso no hay duda.