Entrañable película que sonríe a la vida, al amor y las ganas de vivir. Sobretodo a ese amor físico que ya no está involuntariamente. Muy acertada en todos los momentos porque siempre hay algo más. Una fiesta, una cena, un viaje, una mala mañana. De los momentos del apartamento a un bar. Y de todos esos rincones sacas algo. Un sonrisa desde luego pero también la nostalgia, un nuevo camino, una nueva esperanza. Nueva personas que se cruzan en tu camino. Una historia romántica a más no poder. Y adquiere el grado de romántica porque la otra mitad, Gerard Butler, se fue. Y porque la que se queda, Hillary Swank le sigue abrazando,recordando y queriendo. A través de esas cartas que él escribe Swank tiene que levantarse y caminar sin él para el resto de sus días. Pero en todos esos días algo nuevo pasa, otra carta que llega, otra razón más para vivir sin él, otros hombres como él.
Un Gerard Butler que deja de ser Leónidas y se disfraza de chico irlandés con tropezones de austeridad. Una Swank que encanta y enamora en todo momento. Cathy Bates en su papel de madre curtida y que recuerda la pérdida de un hombre que también se fue pero que no ha muerto aún. Lisa Kudrow en su papel de Friends en todo momento. Un conjunto de actores que nos dan algo continuamente, que no dejan que nos descolgemos porque siempre hay una salida de tono, un chiste, un recuerdo, una discusión que nos hace estar pendientes de esta historia. Son tres estrellas bien merecidas porque entretiene, se sale de esa tendencia más carnal y apuesta por un guión más vacilón. Apuesta por lo abstracto sin poder dejar lo terrenal ni un momento.
Me quedo con Butler y el striptiese del dormitorio, el karaoke de Swank, su primer encuentro en Irlanda. Al igual que las cartas, la historia te va recopilando una historia, una vida y un amor. El puzzle de la vida. Dentro de la línea de estas pelis esta se cuida en salud, va a lo seguro y no cojea. Recomendable y que se puede volver a ver con mucho gusto sin que aburra. Para verla acompañado mucho mejor. Por eso de que toca la fibra mucho.