Nos venden la moto de ser una película basada en el popular juego de Hundir la flota pero en realidad es un juego de armamento de efectos especiales y construcción digital de la mano de los creadores de Transformes, mega alienígenas muy pero que muy capaces y malos contra humanos actores que cobran poco por su desconocimiento absoluto. Liam Neeson la única cara que rascará algo de presupuesto junto a la artista invitada de la que hablo dos párrafos más abajo.
Dirige el espectacular Peter Berg, Hancock y La sombra del reino, y garantiza caña de la buena, escenones de megapotencia sideral en una pelea que como el título de la película indica, no va a defraudar a los amantes de los Cowboys vs Aliens.
Rianna, la popular cantante, tiene un papel dentro de los barcos militares del film. Recurrente acierto comercial al servicio del tío dólar que bajará el ya de por sí bajo contenido, a mí gusto, quede claro, de una película basura que se agotará en sí misma en cuanto muestre todo su arsenal y logre las boquiabiertas caras de su público que no seré yo.