Arriesgado. Bastante arriesgado abordar un tema tan peliagudo y traer al recuerdo de todos, especialmente del público estadounidense la tragedia del 11 S. Arriesgado para el espectador europeo por si se oyera resonar demasiado el consabido himno y nos dejara un poco asqueados. Pero en eso tenemos algo a favor: el director, Paul Greengrass es inglés y la película es coproducción de EEUU, Gran Bretaña y Francia. Esperemos, por tanto, que no cojee por ahí. También es arriesgado porque tiene que mantener la atención del espectador durante 111 minutos en un espacio muy limitado.
Greengrass tiene como aval, hablando de este tipo de películas semidocumentales, la película “Bloody Sunday”. Eso como aval documental, pero tiene un aval técnico (que no artístico) en la última entrega de la saga Bourne (“El mito de Bourne”) y la que está por venir. Combinación extraña que puede ser productiva.
Quiero ver como se retrata el interior del avión, de forma claustrofóbica y con una tensión palpable. Algo como lo poco de bueno que tenía “Plan de vuelo”.
Fuera de si es esta será una buena o mala película, es algo que hay que ver. El primer largometraje serio que llega sobre uno de los sucesos más importantes del joven siglo XXI no puede ser obviado. Después llegará Stone y su “World Trade Center”, me temo que más pasional. Seguramente vista la película habrá mucho que opinar... y espero olvidarlo para hablar un poco de cine.