Difícil y atrayente se muestra esta oferta en la cartelera que no promete continuar demasiadas semanas. No sé si es cine español o no lo es, si es americano o si es catalán. Es cine de Isabel Coixet. Una autora muy especial.
Ya desde el principio, o lo que realmente fue su primera película importante, "Cosas que nunca te dije", Coixet quiso cruzar el charco porque para ella eran más atrayentes las conversaciones en una lavandería típicamente americana que un menú del día con fruta del tiempo en alguna barriada de Barcelona. Bueno, es una elección. En cualquiera caso la película le salió bastante bien, con un presupuesto mínimo (véase algún micrófono colgando por la parte superior del plano en algún momento). Como directora siguió creciendo, apostando por hacer un cine diferente completamente a su medida. Y ahora nos trae nada más y nada menos a Tim Robins a España para que ponga verde a George Bush y de paso en algún rato libre presente su nueva película.
Y quien dice Tim Robins, dice Sarah Polley, actriz de cine independiente (independiente del bueno las más de las veces) que ya trabajó con Coixet en "Mi vida sin mí". Y dice Julie Christie, como secundaria de lujo. Y ¿por qué no? también dice Javier Cámara, que es un as.
Presentados ya los personajes, nos encontramos con una premisa de lo más curiosa: una historia intimista en una plataforma petrolífera. No avanzaré nada más por si hay algún lector que aun no se ha enterado de qué va esto. Desde luego no es lo que estamos acostumbrados a ver. Arriesgado para ser cine americano. Imposible para el cine español. Parece, qué sé yo, cine francés.
Muchas palabras como ya amenaza el ambicioso título. Sentimientos profundos aunque a veces sutiles. Fotografía claustrofóbica para reseñar un universo aislado, un mundo aparte donde el tiempo avanza de otra manera.
Y quizá por eso muchos no la han aguantado, la han criticado duramente. Otros la han disfrutado. Y la propia autora la ha definido como su mejor trabajo. Cosa que por cierto también ha hecho otro autor muy diferente, Woody Allen con Match Point -coincidiría en que es de las mejores de los últimos tiempos, pero esto es otra historia.
No me perdonaría quedarme con la incertidumbre de si me he perdido o no una muy buena película. Ver y postcriticar.