Lo más cercano al buen cine que puede tener esta película es el talentoso movimiento y encuadre de cámara del de sobra conocido Burton. Deep hará agradable soportar un film que por su puesto quiero acercarme a contemplar pero por respeto a un maestro aunque en esta película haya vaciado el poco tiempo que le dejara su cargador mientras hacía Corpse Bride de próximo estreno. Los colores, la posibilidad de un mundo aparte Burton no tienen sentido en una especie de musical hablado en clave semiteatral. No es su género desde luego. Una cosa está demasiado clara. Tiene tiempo y dineros a su disposición para animarse con todo lo que le apetezca y una peli más que lanza al mercado. Espero que al menos los niños puedan creerse los colorines y que alguien disfrute de la historia que es mala, será recalcitrante y repetitiva y a la altura como original de El Grinch. Ahora, eso sí, magnífica dirección, qué menos.