Al fin pude acudir a Troya ayer mismo. Los antecedentes de la película, su publicidad y bombo ya me hicieron decantarme por mi punto de curiosidad hace tiempo, y resulta que la fortuna me permitió tardar en verla recibiendo estímulos y opiniones al respecto de la misma en esta página. En fin, estaba expectante.
Me encontré con una historia grande y digna de mención sobre todo habida cuenta que hacía tiempo no se nos presentaban historias de griegos en el cine actual. De forma justa y más o menos hermética se condensa poco a poco la adaptación de un clásico dándole forma y creciendo hasta quedarse en lo que es, un mundo de acciones y honores que se nos quedan lejanos ante hombres que hasta parece se sienten deseosos de morir, aburridos con la paz.
Lo más majestuoso a priori debiera de ser Troya, pero pienso el tiempo que tarda en mostrarla es tanto que pierde su magnificencia. Se muestra normalita, no tiene ganchoi, por su puesto a mi entender. El mero trámite del caballo, sin más ni más, da muestras de que se ha tratado de desvincular de espectáculo para respetar al clásico pero a una vez se ha alejado del talante real del texto, porque los discursos están incompletos, los razonamientos e importancias de personajes son recortados y las actuaciones en algunos casos bastante míseras. Al menos, en su defensa diré que como no parece ser capaz de transmitir ese espíritu clásico se limita a enseñar lo sucedido y con honor con la valentía de hacerse cargo de esta película nos la deja en la calma de una civilización muy distinta a la helénica.
Desde el comienzo del film la banda sonora cojea la historia y su intensidad de forma insultante. Siento demasiado la pérdida de una fuerza mayor, una descomunal atracción por parte de un trabajo de partitura que a mi entender debiera de ser un tanto más potente. Solo algunos fragmentos merecen la necesidad de las escenas. Mal. Hace perder a la ambientación toda credibilidad.
Por otra parte, actores como Orlando deberían plantearse su capacidad, la primita desvalida sus rostros, y algunos secundarios su pertenencia al teatro. Brad Pitt está soberbio aunque pienso el director ha provocado menos elegancia en su actuación como en el caso de Ulises, presentado como un tipo normal y corriente cuando estre todos esos representa mucho más de lo mostrado, un gran olvido entendible, ya que si deja rienda suelta a ese personaje también tendría que dársela a otros tantos. Por mí como si hubiera invertido 3 horas de films pero hacerlo más exacto.
Hector merece una especial mención, no es un personaje sencillo, algunos lo acusan de cobarde, yo le acuso del más valiente de todos. Los registros de rostro que desarrolla durante el film, sus ojos en expresiones complicadas y el manejo de la rabia por parte de su intérprete Eric Bana me parecen muy dignos de mención. Peter O´Toole magnífico en una dirección sencilla que no pretende demasiado, que se levanta algo en el final, en la presentación de Aquiles pero que permite por otro lado cámara rápida en el lanzamiento imparable del héroe. Supongo no sabe como realzar a los personajes sin estropear la luz intensa de las tierras aunque en los momentos de oscuridad, sobre todo con Aquiles tras las sombras es importante el trabajo al respecto.
La sensación del público de alrededor fue como un sin más, ceo que porque la historia es demasiado perfecta y diseñada, demasiado bella pero la intensidad visual es normalita, cosa que no pasaba en el Señor de los Anillos. De acuerdo que son distintas, de acuerdo que en una hay magia, pero algo más de arrojo no hubiera venido mal para tragarla mejor. No es para tanto.