Comienza Sundance, amigos. Ya no es exactamente el espacio abierto para el cine más indie de EEUU; la industria ha sabido hacerse su hueco en el festival fundado por Robert Redford. Pero, desde luego, sí es una de las citas festivaleras del curso.
Este año, a nivel mediático, todos parecen fijarse en Jobs, el biopic de Steve Jobs protagonizado por Ashton Kutcher (dios nos guarde), y en Lovelace, que repite recurso, el apellido en el título: Aquí la biografiada es la actriz porno Linda Lovelace. Le da vida Amanda Seyfried, una de las chicas de moda. Tendrá que darle un giro bastante profundo (perdón) a la imagen de (sosísima) muñeca de porcelana que ofrece en Los miserables.
Pero hay más chicha en Sundance. Estrena Winterbottom, también con biopic, The look of love. En este caso del editor de cine porno (de nuevo) Paul Raymond, al que interpreta el actor fetiche del director británico, el grandísimo Steve Coogan.
Pero hay más sorpresas. Joseph Gordon-Levitt, actor fetiche de Rian Johnson y uno de los ídolos de mi compañero Sherlock (había que decirlo, compi), debuta como actor y lo hará con Don Jon's addiction. También actúa, junto a Scarlett Johansson y Julianne Moore. ¿Y de qué va? Pues sí, pues sí, la industria del porno también tiene aquí algo que ver. ¡Cómo andamos!
Otros nombres: Gael García Bernal, que inauguró ayer el certamen con el documental sobre inmigración ilegal (no todo iba a ser sexo) ¿Quién es Dayani Cristal? También James Franco, máximo responsable a varios niveles de Interior: Leather bar, versión explícita (dice él) de A la caza, aquel controvertido thriller de William Friedkin con Pacino infiltrado en el ambiente gay nocturno para dar con el asesino de turno.
Sigo: Shane Carruth, director de Primer, que mostrará su nueva apuesta, Upstream color, dicen que a medio camino entre la ciencia-ficción y una peculiar historia romántica. Y Park Chan-wook, que dirige Stoker, esta vez en suelo usamericano con rostros jóvenes como el de Mia Wasikowska y rostros ya más allá de lo definible, como el de Nicole Kidman. Y Jane Campion, ella con Top of the lake, en realidad una miniserie de 7 horazas. Estará también en Berlín.
Y no quiero olvidar que anda por ahí Paul Schrader con The canyons, peli cuyo rodaje ha debido ser un pochocho de tres pares de cojones. Es lo que pasa cuando dirige el visceral Schrader y protagoniza Lindsay Lohan. Por cierto, sí, uno de los protas es, parece ser, un ex actor porno. Por seguir con el leit motiv de esta edición del certamen... Pero no, esta vez lo que trae Schrader es cine negro de serie B.
Soltadas las piezas clave a vigilar, que el festival avance y nosotros seguiremos informando.