Los agentes Mortadelo y Filemón se ven obligados a hacer uso de toda su capacidad para no resolver nunca nada y de sembrar el caos allá donde van, para dar con el paradero de Jimmy, un acomplejado maleante que tampoco despunta por su elevado coeficiente intelectual, circunstancia muy peligrosa cuando llevas colgando de tu helicóptero una bombita atómica que puede hacer ¡PUM! en cualquier momento. Se trata de una desquiciada aventura que refleja de manera fidedigna el espíritu del hilarante universo creado por el genial Francisco Ibáñez.